Las protectoras estamos acostumbrados a que nos dejen perros atados en nuestros refugios, que nos roben lo poco que tenemos en donativos para dar una vida digna a nuestros perros, todo esto es lo cotidiano, lo que se sobrelleva en esta sociedad que necesita avanzar mucho en sensibilidad y respeto hacia los animales.
Pero, ayer, nos encontramos con algo diferente, el asalto bárbaro a las dos instalaciones de la protectora de Guareña, creadas desde la nada, con mucho esfuerzo, dedicación y trabajo de voluntarios y socios. Su refugio y una pequeña parcela acondicionada como zona de acogida han sufrido cortes en sus vallas y candados. Las consecuencias: casi setenta perros vagando aterrorizados (casi todos han sido recuperados ya), dos perros desaparecidos (uno de ellos ya tenía adoptante), un perro atropellado que sufre fractura de caderas, más de una docena de perros con heridas por ataques entre ellos, un perra operada por graves lesiones de mordiscos.....dantesco.
Esta salvaje agresión no se dirige a los animales, en el único espacio de verdadera protección para ellos, sino a la propia protección animal y a lo que las protectoras y los defensores de los derechos de los animales representamos.
Por supuesto, se ha presentado una denuncia y exigimos la máxima entrega en la investigación para dar con estos individuos.
La noticia en el Diario Hoy